Vamos a revisar juntos los distintos modelos que nos permitirán pasar de insecticidas para mantener nuestra casa a salvo de picotazos, zumbidos y otras sorpresas desagradables, además de hojas y el insufrible polen para los alérgicos.
Vamos a repasar las posibilidades…
Las más sencillas aunque también las menos versátiles. Se trata de comprar malla de nylon muy fina por metros en tu ferretería, recortarla al tamaño de tu ventana y pegarla al marco de la misma con cinta adhesiva (también se puede hacer con velcro, funcionando mejor como ‘quita y pon’).
Como imaginas, su durabilidad y resistencia son mucho menores que con las otras opciones, por lo que solo lo recomendamos para salir del paso, en ventanas de poco uso o lugares de vacaciones.
Es un paso 2.0 de la anterior: crear un marco de madera o aluminio a medida de la ventana y grapar en él la malla de nylon.
Después se puede sujetar de distintas formas al hueco de la ventana, siendo la más habitual con silicona –si la queremos siempre fija- o creando enganches laterales.
Mosquiteras enrollables
Nuestra recomendación, ahora que hay tanta variedad y a tan buen precio. Puedes comprar un kit de instalación en bricocentros, o encargarlo a medida a un profesional del aluminio por un precio mayor pero con mejores garantías de acabado y encaje.
Se compone de una caja superior donde va enrollada la mosquitera (igual que una persiana, vamos), unas guías laterales y unos anclajes inferiores para mantenerla tirante y sujeta. No solo hay mosquiteras verticales, sino también laterales, pensadas para no tener que agacharse o ponerse de puntillas en las puertas.
Estos modelos son más caros, pudiendo acercarse a los 100€, pero el resultado tanto funcional como estético será muy superior en todos los sentidos.
Cortinas mosquiteras para puertas
Las míticas cortinas de puerta que apartamos con la mano al pasar. Solo requieren atornillar su soporte –normalmente de madera- a la parte superior del marco de la puerta, y evitarán que pasen insectos sin manos para apañárselas.
Mosquiteras plisadas (en acordeón)
Parecidas a las anteriores, estas se cierran en pliegues, y aunque ofrecen más flexibilidad en cuanto al espacio que ocupan y su uso, no resisten a fuertes corrientes de viento. Además, resultan bastante más caras, pudiendo duplicar el precio de las anteriores.
Mosquiteras abatibles (con bisagras, para poder abrirse)
Actúan como dobles puertas, pudiendo abrirse hacia el exterior para dejar paso. Son realmente muy prácticas y cómodas. El precio rondará los 100€, pero su instalación será algo más complicada, tenlo en cuenta.
Mosquiteras para ventanas correderas
Encajan perfectamente en el perfil de las ventanas, ocupando justo el espacio de una de sus hojas, y deslizándose de un lado al otro para cubrir la que quede abierta. Como imaginarás, deberás medir con precisión el hueco para que un profesional (o tú, si eres un manitas de nivel superior) fabriquéis el artefacto a medida. Resulta económica y muy práctica.
QUÉ TENER MUY EN CUENTA
El material es importantísimo si queremos que nos dure bastante tiempo. Elije PVC o fibra de vidrio para disfrutar de tu mosquitera durante años, y fíjate en detalles como piezas, rodamientos, recambios…
Por último ten en cuenta que merece mucho la pena recogerlas y almacenarlas cuidadosamente cuando no sean necesarias, y ponerlas a resguardo cuando haya mucho viento y pueda dañarlas.
Fuente: blogs.20minutos.es